"Banda sonora" es el primer título escrito por un autor en solitario para Editorial Agujero de Gusano y se suma a la colección de narrativa junto a "La ciudad de los ahorcados" (2019) y Resaca: relatos rescatados (2020).
Una veintena de ficciones aderezadas por algunos versos componen la segunda obra literaria de Sergio Martínez, tras la publicación de "Rayos y relámpagos" en 2016. El autor nacido en Puebla en 1973 y avecindado en Aguascalientes ha sido merecedor de diversos premios y menciones honoríficas en concursos literarios locales y nacionales, y además ha publicado en La Jornada Aguascalientes, Revista Sputnik, Punto de Partida (UNAM) y Luvina (UDG).
Los relatos de este libro tienen como hilo conductor la música, cierta música en específico, que se reproduce y navega entre el amor y la ciudad, entre el lado A y el B, cual disco de vinilo, como la vida misma.
En el principio fue el verbo, después la nota musical. Esa combinación implosionaría en mi cabeza; muchos años después nacería Banda sonora. Dividido en dos lados cual disco de vinilo, la ciudad y el amor son los escenarios donde se desarrollan las historias que proponen al lector observar y escuchar la vida pasar.Sergio Martínez
Puede ser un adagio, un allegro o un presto, un dios que no quiere ser dios, un imperio en el ombligo de la luna, un torero que nadie conoce, un matricida, el amor que nace en una escuela, o se escapa en un motel, un suicidio para convertirse en fantasma y bailar un vals, un migrante que nunca termina de irse o de llegar, una declaración de amor, un rompecabezas que se construye pieza a pieza caminando por las calles del Distrito Federal, un hombre lobo, un diálogo con Dios o con el diablo, un filicidio, o unos versos que pretenden llegar a dos cantautores que quiero y admiro.
Banda sonora lo escuché durante más de 30 años y lo escribí en los últimos dos. Entre tragos de ron y vermut las historias fueron naciendo al ritmo de las canciones, sufrí, gocé, dudé, escribí, y borré cuando las letras sobre el papel no estaban a la altura de las canciones. Algunas veces me guió la imaginación, la observación, el corazón, otras los personajes tomaron su propio camino, fue emocionante ir materializando, a través de las historias, el corpus que hoy se presenta como libro.
Banda sonora tiene una doble aspiración; por un lado, le propone al lector realizar un viaje literario y musical; para hacerlo, puede acceder a la moderna rocola que viene en el forro posterior del libro y escuchar para descubrir la simbiosis entre los textos y la música. Por otro, es un homenaje a la música con la que crecí y estoy en deuda, en la que, de alguna forma, me he visto reflejado y he disfrutado por horas, solo o acompañado, en los mejores y en los peores momentos, porque la música es también un bálsamo.