Call me old fashioned… please! | Por Mónica Castro Lara |
Recuerdo haber visto una entrevista de Fran
Lebowitz hace un par de años en donde hablaba sobre lo mucho que detesta subirse
a un avión, pero en especial, el único vuelo que ha hecho a Australia. “Es
el vuelo más largo en toda mi vida y, por lo tanto, el mayor tiempo que he
pasado sin fumar. Fue horrible, parecía una niña preguntándole a cada rato a la
aeromoza si ya habíamos llegado y me miraba con cara de ‘estás loca, apenas
llevamos 4 horas’. Deduzco que las únicas personas que viven en Australia son
aquellas que no tuvieron el valor de enfrentar el vuelo de regreso”. Ese
fue mi primer acercamiento consciente con Fran y automáticamente, me pareció
una mujer en extremo genial, cruda, divertidísima y sin miedo a decir
exactamente lo que piensa. Por eso, cuando andaba navegando por Netflix el mes
pasado y apareció el tráiler de ‘Pretend It’s A City’, inmediatamente me
impacienté a que se estrenara.
Si no conocen quién es Fran Lebowitz, lo harán (y muy bien) a través de la serie documental de siete fabulosos episodios llamada ‘Pretend It’s A City’, dirigida por el buen Martin Scorsese, amigo de toda la vida de Fran. La amistad entre el cineasta y la autora tiene una muy peculiar y fabulosa dinámica que traspasa la pantalla y de inmediato lo contagian a uno con sus divertidas interacciones (Martin simplemente no puede parar de reírse como histérico en cada intervención que hace Fran). La serie es una especie de tributo a Nueva York desde el punto de vista de este par de neoyorquinos setenteros; un pequeño recorrido por la Gran Manzana acompañada de la perspectiva humorística sarcástica y oscura de Lebowitz quien discute temas diversos como el trabajo, el transporte, el arte, la literatura, el sexismo etc. El título de la serie por supuesto es de la autoría de Fran, cuya relación amor-odio de más de cincuenta años con Nueva York, la ha llevado a ser una de las autoras estadounidenses más reconocidas y una oradora pública altamente solicitada. “Es lo que quise mi vida entera: que la gente preguntara mi opinión sobre las cosas y no tuvieran derecho a interrumpir”.
Antes de trabajar en la revista de Warhol, con el que nunca se llevó bien, trabajó en la revista ‘Changes’, cuyos contenidos eran básicamente políticos y culturales en tono chic; dicha revista fue fundada por Susan Graham Ungaro, la cuarta esposa del jazzista Charles Mingus. ¿Se imaginan? Después de otros trabajos en revistas, publica su primer libro titulado ‘Metropolitan Life’ en 1978 y luego le sigue ‘Social Studies’ en el 81; ambos son una colección de ensayos sarcásticos en donde narra las constantes irritaciones y frustraciones de vivir en el Nueva York de los años 70s. Acto seguido, Fran se convierte en una celebridad local, frecuentando el famoso Studio 54, constantemente asistiendo a fiestas, conociendo y codeándose con la crème de la crème del medio artístico y cultural. Y así es como básicamente, Fran se convierte en leyenda y en un fashion icon, le pese a quien le pese. *suspiros bonitos*
“Quería que se sintiera como una especie de irrupción de Fran a nuestros hogares y que nos ‘vomitara’ sus pensamientos sin tapujos”.Martin Scorsese