Swamp Thing: la defensa de la tierra desde el terror

Moore habló de contaminación, denunció el capitalismo neoliberal, puso sobre la mesa el daño que el modelo de producción le está haciendo al planeta.
Por Jorge Tadeo Vargas |

“Protejo lo verde de este planeta,
mientras exista no podrá morir”
Swamp Thing

En la década de los setenta Len Wein unió su talento al de Bernie Wrigthson para crear una historia que tenía como personaje principal a una especie de monstruo con conciencia humana, pues su origen se debía justo al asesinato de una persona a la cual el pantano la adoptó y le dio la fortaleza para continuar viviendo ya no como humano, sino como una “cosa” que en su primer época solo tenía como objetivo la venganza contra quienes lo habían convertido en lo que era. Una cosa del pantano (Swamp Thing) que fue el nombre que se le dio al cómic en donde hizo su aparición. Era pues un producto de su época cuando el horror, el terror eran fundamentales en las historias gráficas. En 1976 después de varios años en circulación, la serie tuvo un bajón en ventas y se canceló.

En la década de los ochenta, Wes Craven decide llevar la historia al cine y filma una película con muy buenos resultados en taquilla, sobre todo si tenemos en cuenta que era una película serie B, lo que hace que DC Comics tome la decisión de revivir al personaje con un nuevo equipo creativo y un nuevo nombre: The saga of Swamp Thing. Los nuevos artistas rompen con el final propuesto con el cierre de su primer época por Len Wein, lo cual a éste no le gustó y trató de desmentir la nueva historia.

El nuevo equipo no aguantó la presión y se fue desarmando hasta llegar al número veinte con el que comenzó posiblemente el mejor momento para Swampicomo cariñosamente comenzaron a llamar los fans a esa cosa, al monstruo del pantano.

A mediados de los ochenta un joven inglés que iba de a poco ganándose un nombre en la industria de las novelas gráficas y los cómics tomó el proyecto a su mando. Su nombre era Alan Moore y en ese momento estaba trabajando en la idea de unas de sus creaciones que más dividendos le ha dejado como creativo. Me refiero a Watchmen.

Este joven con ideas anarquistas vio en Swamp Thing la oportunidad de ir más allá de una simple historia de horror y fue así como tomó las riendas de la historia con absoluta libertad creativa de llevarlo por donde él quisiera. Así sin perder el folk horror tan característico de la historia, Moore fue perfilando en lo que se convertiría su arte en las próximas décadas: una plataforma para denunciar los excesos del sistema de clases y su violencia hacia la naturaleza y las poblaciones humanas más vulneradas. Swamp Thing comienza entonces a convertirse en un espacio desde donde se hace visible la contaminación y los daños que el incipiente neoliberalismo como forma hegemónica del capitalismo le hace a los ecosistemas en individual y al planeta en general.


La llegada de Moore le dio a la historia todo un argumento de denuncia social en un momento que era urgente y necesario hacerlo. Reagan tenia en jaque a Centroamérica con sus proyectos de dominación y control de una región que no ha logrado reponerse de esa década, Thatcher desde Inglaterra nos recordaba que “no había alternativa” que teníamos que confiar en el neoliberalismo, mientras que en otros países latinoamericanos comenzaban a ser el laboratorio para experimentarlo; Chile por citar el más grande ejemplo.

Swamp Thing reforzó la protesta socio-ecológica en un momento clave que no se supo aprovechar, pagando hoy las consecuencias de la falta de acción en el momento adecuado. Esto a la par de ir dotando al protagonista de cierta introspección en la búsqueda del significado de la vida a nivel individual, de reflexionar en quiénes somos y en qué nos convertiremos. Claro, sin dejar fuera todo el folk Horror tan característico de la serie y que con Moore fue tomando mayor fuerza, dado el propio misticismo, la espiritualidad del escritor. La historia permitió que fuera desarrollando sus ideas políticas y personales a la par que la dotaba de mayor complejidad. Tal vez por eso fue por lo que complicó la llegada de otros autores.

Para Moore no solo era importante la denuncia, sino también dejar claros conceptos que para él son importantes como el amor, la solidaridad, la amistad; justo así fue como los personajes secundarios fueron teniendo mayor fuerza. Abigail Crane-Holland no era solo una chica intentando encontrar a su amor perdido, de a poco se fue enamorando de Swampi. Esto por mencionar al más importante de todos los personajes secundarios del cómic, permitiendo con una narrativa no lineal, descentralizada del protagonista y abriendo espacios a otros personajes que con el paso de los tiempos tomarían su propio protagonismo. El caso de John Constantine que paso de ser un “invitado regular a la serie de Swampi” a tener su propia serie -Hellblazer-, una película, una serie de TV con una temporada, participación en otras series, además de numerosos cameos en películas animadas, es uno ejemplo de cómo fueron tomando mayor complejidad y protagonismo los personajes que acompañaban a la cosa del pantano.

Moore habló de contaminación, denunció el capitalismo neoliberal, puso sobre la mesa el daño que el modelo de producción-consumo le está haciendo al planeta. También habló de salud mental, de la necesidad de buscar de forma colectiva espacios de ayuda común, pero también fue creando otra especie de antihéroe, alguien con una moral distinta que estaba/está dispuesto a todo con el objetivo de defender a la naturaleza. Lo convirtió en un guardián implacable decidido a todo por lo que él considera correcto. Era un monstruo sí, pero el terror que ejercía tenía una razón y un objetivo.

El folk horror característico fue avanzando de poco a una mezcla de éste con un misticismo muy particular de Moore, con un poco de gore, que le daban la libertad de convertir a Swampi en un ser capaz de todo por defender a quienes ama y en lo que cree.


El capítulo donde viaja a Gotham City a rescatar a Abby de la cárcel, atacando a la ciudad con un crecimiento desmedido de la vegetación no tiene desperdicio. Incluso Batman no sabe cómo actuar ante un ¿villano? que no mata a nadie, al contrario, le pone vida a una de las ciudades más oscuras y grises del universo DC. Es pues un antihéroe porque no pretende ser un héroe, solo quiere que este sistema deje en paz a la naturaleza y a las poblaciones más vulneradas. Incluso en el caso de Abby es una mujer violentada, agredida que no sabe cómo escapar de la violencia machista, pues a pesar de estar enamorada de Swampi, tiene que lidiar con las decisiones que ha tomado, aunque estas le exploten en la cara en un mundo machista, patriarcal.

Después de varios años de la mano de Alan Moore, éste lo deja para ir a buscar nuevos retos. La popularidad que había ganado tanto con Swamp ThingWathcmen V for Vendetta se lo permitieron, así dejó a la serie en una especie de orfandad de la cual no se ha recuperado, los intentos por parte de DC Comics no lo han logrado.

Aunque la serie gráfica trajo otros dividendos como fue una secuela cinematográfica, también de serie B que tuvo poca o nada de repercusión, una primer serie de TV que tuvo tres temporadas, una serie animada y numerosos cameos en películas y series de otros personajes de este compañía de cómics. Es Swamp Thing un antihéroe recurrente en las adaptaciones a la televisión, streaming o cine.

Mención aparte merece la revisión que se le hace en esta década al personaje con una nueva serie live action producida por HBO que aunque está muy cercana a los orígenes contados por Wein y Wrigthson, tiene una gran influencia de lo que fue el paso de Moore.

Episodios con muy marcados por el noir, por el folk horror con ciertos tientes de gore. Es posible que sea una de las mejores adaptaciones que se han hecho de los cómics de DC, sin embargo no superó la prueba quedándose en una sola temporada, en tiempos de sobresaturación de series y películas de hombres en mallas. Aunque siempre se rumora que el proyecto será retomado.

En tiempos de crisis socio-ecológica, de #EmergenciaClimática es importante tener referentes como Swamp Thing -aunque solo sea ficción- pues nos recuerdan que incluso en pleno colapso es posible renacer. No importa si el mundo es un lugar lleno de horror, es un sitio oscuro para vivir, siempre tendremos la solidaridad, el amor, la amistad y la colectividad que nos ayudan a transitarlo. Esto es lo que puede rescatarnos. Incluso si somos unas cosas del pantano para el sistema.

Desde la rebelión contra Elisyum
#PunkRockJesus


El autor: Jorge Tadeo es escritor, ensayista, activista, anarquista pero sobre todo es panadero casero.
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