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Cartas a Jonas: convocatoria de arte postal

La Galería Experimental Liliput ha convocado a homenajear al cineasta lituano Jonas Mekas a través de un ejercicio de arte postal que tendrá como fin una exposición presencial de todas las piezas recibidas hasta el 20 de julio. Actualmente se han aceptado más de 70 piezas provenientes de 13 países.

El realizador Jonas Mekas, fallecido en 2019, es considerado uno de los grandes poetas cinematrográficos de la contracultura neoyorquina.

Convocatoria Internacional de Arte postal Cartas a Jonas 
CARTAS A JONAS

Convocatoria de ARTE CORREO
Tema: Homenaje a Jonas Mekas
Fecha límite: 20 de Julio de 2021
Fecha de EXPOSICIÓN 1-  24 Julio 2021 
Técnica: Libre (acuarela, pintura, grabado, dibujo, bordado, video, collage, fotografía, etc.)
Tamaño: Máximo Carta (21 x 28 cm)
Participación: Gratis
Es posible participar con un máximo de 2 obras.
Abierto a todos, sin límite de edad, nacionalidad, etc
Indique claramente en el reverso de su trabajo: nombre y apellido / dirección / dirección de correo electrónico / título del trabajo / año.
Cada participante debe enviar trabajos relacionados con la obra de JONAS MEKAS
Sin selección, sin jurado, sin venta.
No se acepta ninguna responsabilidad por los problemas causados por daños, demoras o pérdidas.
Las imágenes de las obras enviadas pueden ser utilizadas por la organización de la manera y para los fines que se consideren apropiados, sin reclamo financiero de los artistas participantes.
Está prevista una primera exposición en Galería Experimental Liliput en Julio de 2021.
En los próximos meses, se comunicarán los detalles de la exposición.
Los trabajos deben ser enviados únicamente por servicio postal tradicional.
La opción de enviar los trabajos en sobre o fuera de sobre es libre.
Se excluirán los trabajos pornográficos, racistas, militaristas, homofóbicos, nazis, blasfemos, sexistas, etc.
Los trabajos recibidos no serán devueltos.
ENVIAR A:
Devin Cohen
Diagonal 18 sur 4563, Colonia Jardines de San Manuel Puebla, Puebla México CP:72580

Contacto: liliput.xperimental@outlook.com
Devin Cohen
Dirección
Galería Experimental Liliput


Pacomostro lanza el sencillo «Fuego en el Jardín»


A partir del primer minuto de este 11 de junio estará disponible en todas las plataformas digitales “Fuego en el Jardín”, primer sencillo de lo que será la tercera placa discográfica del músico poblano ‘Pacomostro’.

El material de lanzamiento fue grabado, mezclado y masterizado en su totalidad por la productora Casa Yonki y la composición de Paco Muñoz cuenta con la participación especial de Nono Tarado, uno de los rocanroleros más aguerridos de nuestro país. También colaboran Ury Morales en el saxofón y Carlos Iván Carrillo en la guitarra eléctrica, bajo y teclados.

Paco Muñoz, mejor conocido como ‘Pacomostro’ ya cuenta con una trayectoria importante en el undergroud del rock poblano. Tiene publicados hasta el momento dos álbumes de estudio y ha compartido escenario con importantes músicos, cantautores y exponentes del rock independiente a lo largo y ancho de la República Mexicana.

El single “Fuego en el Jardín” es un adelanto del nuevo material de estudio que ‘Pacomostro’ nos traerá en septiembre, y la canción de estreno viene acompañada con un video oficial realizado en conjunto por Revista Sputnik y Casa Yonki.

“Una canción que, como varias de este disco, son hijas del confinamiento. Una rola que describe el hastío que causa todo a tu alrededor y que algunos piensan se te pasará con buenos deseos”. Paco Muñoz

 

“El Recreo de los Gallos” será el nombre de la nueva producción discográfica que contará con participaciones especiales de cantautores mexicanos y está siendo producido por Carlos Iván Carrillo. En palabras de su autor, “este nuevo disco se deslindará un poco de la agresividad que caracteriza mi música y se remontará a la sutileza y melancolía de letras más profundas y personales, pero sin perder la calle y la mugre que me representan”. La nueva obra de ‘Pacomostro’ seguramente será un referente para muchas noches de borrachera y para la rola en Puebla.


Los Fantasmas del Rock y los primeros rocanroles originales en Puebla

Por Polo Bautista


¿Cuál fue la primera composición rocanrolera original hecha en Puebla? Sin duda se trata de una cuestión aparentemente sencilla y a todas luces natural para cualquier interesado en los anales del rock and roll poblano. Sin embargo, la pregunta está lejos de solucionarse satisfactoriamente. A continuación se exponen brevemente algunos datos curiosos y ciertas luces al respecto.

Se tiene por común acuerdo que las primeras agrupaciones rocanroleras angelopolitanas surgieron a finales de los años cincuenta con los Demonios del Rock y Los Teddy Gangs. Ambos conjuntos pueden considerarse pioneros del rock and roll, aunque en ningún caso existen registros de composiciones propias, con todo y que las melodías grabadas en los sencillos de 1962 por los Demonios del Rock están acreditadas a algunos de sus integrantes, asunto por demás incorrecto, pues verdaderamente son adaptaciones o covers.

En consecuencia, los primeros rocanroles originales registrados datan presuntamente de 1965 realizados por Enrique González (también conocido como “El Gallo” o “Chessman”), un rocanrolero importante para Puebla que participó en distintos conjuntos sesenteros destacados, por mencionar: Los Gypsies, Los Frailes y Los Novelistas. No obstante, es difícil suponer que a lo largo del primer lustro de la década sesentera ninguna banda o músico se propusiera realizar semejante logro creativo, y simplemente se conformaron con adaptar los temas más conocidos del repertorio rocanrolero. Por lo tanto, dicho asunto pareciera estar zanjado al no contar con ninguna evidencia material o información medianamente fiable, aunque recientemente surgieron nuevos datos que arrojan algo de claridad sobre el tema. Dicha evidencia se encuentra al revisar la fugaz trayectoria musical de Los Fantasmas del Rock.

Conjunto efímero pero entusiasta, Los Fantasmas surgieron a comienzos de los años sesenta y estuvieron conformados por los hermanos René (bajo) y Óscar (batería) Ayón Rodríguez, Miguel Ángel Bashbush (teclado), Enrique Rosas (guitarra), Luis David Benavides (vocalista) y el antes mencionado González “Chessman” (requinto), apodado así por su parecido con el “bandido de la luz roja” Caryl Chessman. La mayoría estudiantes pertenecientes al Centro Escolar Niños Héroes de Chapultepec donde aprendieron sus primeras lecciones musicales en la Orquesta Juvenil.

De acuerdo con González, los hermanos Ayón y demás integrantes ya habían conformado la banda cuando él se integró de forma un tanto casual: “En una pinta de la escuela los conocí, me dijeron que iban a ensayar y yo les pregunté por lo que ensayaban, pues que un grupo de rock me contestaron y ya me les pegué… Logré gustarle a los muchachos, en ese tiempo jóvenes, chavos, teníamos doce años y me dijeron ‘¿por qué no entras al grupo?”. Entonces el joven “Chessman ocupó el puesto de requinto.

Como todas las bandas rocanroleras por aquellos días, tocaron sus adaptaciones de los grupos consagrados como Los Locos del Ritmo, Los Teen Tops o Los Rebeldes del Rock en la estación radiofónica XEHR propiedad de Don Roberto Cañedo, donde su esposa la señora Josefa Benites los escuchó tocar y generosamente decidió amadrinarlos con unos instrumentos eléctricos. Por si fuera poco, también los introdujo al ambiente artístico de las caravanas que organizaron cervecerías importantes como Corona y Cuauhtémoc Moctezuma para que amenizaran los intermedios de las grandes celebridades que visitaban la ciudad. Así, desde muy jóvenes incursionaron en el ámbito artístico aunque solo por una muy corta temporada.

Durante ese tiempo tuvieron experiencias interesantes y hasta divertidas como la que evoca con picardía González sobre César Costa, quien en los años sesenta solía vestir diversos suéteres de grecas. El solista alcanzó tanta popularidad que se volvió moda entre la juventud portar dicha prenda, y de alguna forma, se generó el rumor con respecto a una supuesta fábrica de suéteres que poseía.

Pues bien, “Chessman” comenta con cierto bochorno lo ocurrido durante aquella presentación en el otrora Teatro Variedades de Puebla: “Una señora muy conocida que se llamaba o se llama Ivonne Recek de Luke le regaló un suéter a César… Entonces a mí se me ocurrió decirle ‘¿oye César no tendrás un suéter que me regales?’. Ya te puedes imaginar mi ignorancia”. Claramente el joven guitarrista no lució desconocimiento, sino ingenuidad infantil al dar crédito a semejante patraña sobre la fábrica, pero no fue el único suceso memorable.

Otro momento singular ocurrió tras bambalinas, cuando la mismísima Julissa sufría de nervios escénicos previo a realizar su número y se confesó con Enrique al decirle: “Ay manito estoy rete nerviosa”. Siendo que verdaderamente los abrumados eran Los Fantasmas del Rock quienes realizaban sus primeras actuaciones a tan corta edad, mientras que Julissa ya figuraba en el ámbito rocanrolero nacional. Aquel día se presentaron además de César Costa, Julissa y Alberto Vázquez, el carismático Enrique Guzmán acompañado por la banda Los Salvajes, quienes generosamente le obsequiaron un cable a González para que pudiera conectar su guitarra eléctrica. Sin duda entrañables recuerdos.

Desafortunadamente, la falta de madurez les jugó en contra y el grupo Los Fantasmas del Rock se desbandó prematuramente, no sin antes incursionar en la composición. De acuerdo con González, el cantante Luis David Benavides compuso dos piezas que llevan por título “El rock de los fantasmas” y “Partiré”, los cuales probarían que hubo iniciativa entre algunos rocanroleros por hacer música propia durante el primer lustro sesentero. En otras palabras, serían los primeros rocanroles originales conocidos que únicamente se conservaron en la memoria de sus protagonistas.

Pero sorpresivamente a comienzos de 2020 y antes de la pandemia desatada por el Covid-19, algunos miembros fundadores del grupo Los Fantasmas se reencontraron para una celebración. Oscar Ayón, Miguel Ángel Bashbush y el varias veces mencionado González recordaron a ritmo del rock and roll los viejos tiempos en compañía de amigos y familiares. Increíblemente un tema compuesto por su desaparecido compañero Benavides se volvió a escuchar después de tanto tiempo (¡casi sesenta años!), y en esa ocasión quedó modestamente registrado gracias a la tecnología de los dispositivos móviles. “El rock de los fantasmas” es una pieza que reboza candidez juvenil, de sencilla ejecución y altamente bailable, con más semejanza a los rocanroles clásicos. Ciertamente una precoz manifestación de creatividad rocanrolera en Puebla.

Posterior a Los Fantasmas del Rock, “Chessman” integró otros conjuntos siendo con Los Frailes donde alcanzó uno de sus mayores méritos como compositor, pues registró para la RCA Víctor los primeros rocanroles realizados por un poblano intitulados “Te perdí” y “Tarahumara”. A pesar de que cuenta con una amplia trayectoria artística como músico y comediante al lado de figuras como Luis “Vivi” Hernández, Paquita la del Barrio, Jorge Falcón o Polo Polo, por su mente nunca se extraviaron aquellos primeros rocanroles que tocó junto a sus fantasmagóricos compañeros de juventud.

Los Gypsies: rock sesentero entre Puebla y Chiapas

Por Polo Bautista

Existen numerosos grupos que lamentablemente no lograron registrar su música, las causas pudieron haber sido muchas e indefinidas. Pero su importancia y legado resultan suficiente como para darles una merecida mención en los anales del rock and roll mexicano.

Los Gypsies o Los Gitanos fue un conjunto poblano surgido presumiblemente en 1963. Por sus filas pasaron músicos importantes que hicieron ruido dentro y fuera del estado; así como predecesor directo de la afamada banda Los Frailes. Su primera alineación estuvo compuesta por Arturo Álvarez (guitarra), Enrique González “El Gallo” (guitarra), Ismael Espinoza “Donis” (trompeta), José Madrid “El Cherokee” (saxofón), Raúl Fernández “La Boa” (bajo) y Alberto Reyes “El Tles cuatlos” (batería). La mayoría pertenecientes al Centro Escolar Niños Héroes de Chapultepec (CENHCH).

Los Gitanos se formaron principalmente de dos conjuntos juveniles que no prosperaron, por una parte Los Golden Stars fundado por los hermanos Espinoza, del cual se desprendió Álvarez; y Los Fantasmas del Rock donde participó González, quien espoleó a sus compañeros del CENHCH para formar Los Gypsies.

Al comienzo existieron muchas carencias de todo tipo, principalmente lo referente a instrumentos, por ejemplo, González empleaba una guitarra acústica para rocanrolear, por otra parte, Álvarez fabricó su primera guitarra eléctrica y usó la consola doméstica a manera de amplificador, lo mismo Reyes que practicaba sus ritmos con cucharas. Sin embargo, fue el padre de González quien los apoyó para adquirir sus primeros instrumentos. Reyes recuerda: “A él (Enrique González) le sacó su guitarra, a “La Boa” (Raúl Fernández) le sacó su bajo, a Ismael Espinoza una trompeta… Y así comenzamos a tocar canciones, ya que me ofreció una batería”.

Sus primeros temas fueron covers de conjuntos nacionales encumbrados como Los Rebeldes del Rock, Los Locos del Ritmo o Los Teen Tops. Comenzaron su trayectoria musical de la forma habitual para cualquier grupo incipiente, localizaban fiestas, eventos y reuniones en los que pudieran exhibirse sin paga alguna. Su primera presentación ocurrió durante un festival celebrado en el parque Paseo Bravo.

De izquierda a derecha: Juan Guerra, José Luis Ricart, Arturo Álvarez, José Madrid y Alberto Rey.

Gradualmente se hicieron de renombre, hasta que alternaron con bandas angelopolitanas consolidadas como los Demonios del Rock y Los Blue Jeans, con quienes se organizaban para realizar tocadas y eventos. También se presentaron en restaurantes como Tropicana, lo mismo que clubes exclusivos, por ejemplo, La Lave al interior del Hotel Gilfer, de igual manera, el balneario Agua Azul y en todas las fiestas escolares.

Así transcurrió algún tiempo y aproximadamente en 1964 Reyes había dejado la batería para desempeñarse como vocalista. Su lugar lo ocupó Miguel Ángel Rosado “El Yuca”, un músico más avezado y con aptitudes de liderazgo. Según Reyes, fue gracias a Rosado que tuvieron la oportunidad de audicionar y convenir un trato para grabar, pero al mismo tiempo esto causó su separación: “Nos consiguió un contrato en México, en la RCA Víctor y yo iba como cantante, no iba como baterista del grupo, y yo pensé ‘Nos van a tronar’. Pero no… para no hacerla larga nos dicen: ‘Sale, firmen el contrato’. Y firmamos Los Gypsies. Pero entonces surgió ahí la semilla de los compañeros, que sí que no y fue cuando nos dividimos… que cada quien haga su grupo. Entonces Arturo Álvarez quien era el guitarrista se salió, y yo y ‘El Cherokee’, casi medio grupo se salió y medio grupo se quedó, que es cuando surgen ahí Los Frailes”.

De esta forma Los Gypsies se dividieron, por una parte Rosado y sus partidarios se reorganizaron para formar un conjunto nuevo llamado Los Frailes, integrado por Espinoza, Fernández y González; también integraron al ex Demonio Rodolfo Apango y José Arabi (vocalista). Ellos retomaron el contrato con RCA Victor, que culminó hasta donde se conoce en la grabación de dos sencillos, un EP y su inclusión para algún LP acoplado de rock and roll. Por su parte, los gitanos continuaron siendo Reyes, Madrid y Álvarez; así como el ex Demonio Juan Guerra (vocalista y bajo) y José Luis Ricart “Ricachá” (teclado), a manera de reemplazo para sus anteriores compañeros. 

Sin embargo, Los Gypsies no menguaron. A mediados de aquella década la Cervecería Cuauhtémoc Moctezuma los contrató para una gira programada de nueve días en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, donde fueron bien recibidos al igual que promovidos por la familia Chapital, quienes tenían contactos con periódicos y radiodifusoras locales: “El señor Chapital era compadre del papá de ‘Ricachá’, eran poblanos pero se fueron a vivir a Tuxtla Gutiérrez Chiapas y ahí hicieron un negocio que por cierto se hicieron ricos… El señor Chapital lo hacía porque su hija era novia de ‘Ricachá’, inclusive nos dieron una casa, nos compraron camas, nos daban de comer, nos conseguían tocadas…”, comenta Reyes. Un contrato de nueve días que terminaron siendo dos años.

Su estancia en el estado del sureste fue un éxito. Recorrieron prácticamente todos los municipios chiapanecos y tocaron en ferias, cafés, al igual que los mejores restaurantes como el Flamingos. Sin embargo, debido a la lejanía familiar y muy probablemente al hastío, Los Gypsies decidieron volver a Puebla y disolver el grupo.

Algunos se incorporaron a la etapa final con Los Frailes, como fue para Reyes, Álvarez y Madrid; Guerra se integró o formó otros conjuntos destacados, por ejemplo, 2 + 2, posteriormente 2 + 2 de Colombia, Juan Guerra y su Rock Music. Y Ricart emprendió interesantes aventuras en la escena roquera tanto capitalina como poblana de los setenta con diversas agrupaciones: Bandido, Freeway, Tryciclo y El Trio que suma 7.

Para 1970 la primera generación de rocanroleros angelopolitanos se había extinto casi por completo (a saber, los Demonios del Rock, Los Blue Jeans y Los Teddy Gangs), dando paso a una nueva camada de músicos y grupos influenciados principalmente por la “Ola inglesa” y posteriormente el jipismo con su inherente psicodelia. Los Gypsies no sólo surcaron parte de aquel tránsito generacional rocanrolero, también fueron instrucción musical para posteriores exponentes importantes, y en suma, llevaron su trabajo fuera de la entidad poblana con mucho prestigio. Infortunadamente no existen grabaciones de su música, por lo que resulta necesario recurrir al memorial colectivo, que si bien es falible, aporta suficiente información para reconstruir a grandes rasgos parte de la historia del rock and roll angelopolitano. Una memoria que debería preservarse lo mejor posible.

Nexus: 12 años de libertad, respeto y apoyo mutuo

Por Polo Bautista

 

El espacio cultural Nexus cumplió este febrero -todavía pandémico- 12 años de vida. La mente fundadora para tal empresa se llama Daniel Garrido, pero todos lo conocen como “Guaus”, quien es oriundo del entonces mentado “Detritus Federal” (hoy CDMX) y se mudó a la capital angelopolitana iniciados los ochenta.

Espacio célebre entre artesanos, músicos, artistas y por toda la bohemia que merodea el corazón urbano poblano, ha albergado desde sus comienzos infinidad de actividades eclécticas, por mencionar algunas: exposiciones de artes plásticas, conciertos punks, círculos de lectura, expo vinilos, clases de danza africana, artes circenses, prácticas de capoeira, recitales poéticos, degustación de alimentos, etc. En fin, es un espacio abierto a toda manifestación artística sin importar su naturaleza. Por lo tanto, promueve las libertades del pensamiento, el respeto mutuo y la solidaridad en general, especialmente entre aquellos afectos al arte.

Nexus comenzó a operar para inicios del 2009, cuando el término “espacio cultural” no era habitual en Puebla para referirse a los foros alternativos. Acerca del origen de su apelativo, Guaus menciona: “Me gusta Henry Miller y a partir de ahí se me hizo como un nombre digerible, fácil de acordarse. Dentro de la cuestión del diseño gráfico siempre te piden un nombre que la gente recuerde y sea fácil de digerir… Y funcionó bastante bien porque después la gente le empezó a agregar lo suyo. Había gente que le decía ‘El Anexus’, ‘El Necius’, ‘El Netsus’”.

Originalmente se ubicó en un pequeño cuarto de la 6 Norte 406, muy cerca del mercado artesanal El Parián. Al comienzo, la clientela de Nexus estaba mayormente conformada por artesanos y artistas urbanos relacionados con el “hipismo”, pero paulatinamente arribaron estudiantes de psicología, filosofía, letras y demás escuelas de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, ubicadas en el primer cuadro del centro histórico. La idea inicial fue conformar una galería de arte y café, pero muy pronto albergó eventos musicales, siendo Yave Lira y posteriormente Híkuri las primeras agrupaciones poblanas practicantes del blues que se presentaron en el incipiente foro.

Así transcurrió aproximadamente año y medio, hasta que en 2010 y por consejo de un amigo (Carlos Tonatiuh), Nexus se mudó a la once oriente interior once. El nuevo local era más amplio, contaba con dos salones contiguos amueblados por unos cuantos sillones y cojines enfundados en costales de café. La bebida preferida sin contar las indispensables cervezas fue el “Yolixpa”, que es una infusión prehispánica de varias yerbas con aguardiente muy típica en las zonas serranas al norte del estado poblano. Ahí tuvieron oportunidad de presentarse bandas como De Algún Tiempo A Esta Parte (DATAEP), proyecto liderado por Iván Jiménez; también Caca de Gato de Adrián Romero (ahora “Kin Nini”) e Infrasónico, fundada por “El Abuelo”, ex integrante de la reconocida banda surf Los Pegajosos. Todas esas propuestas fueron muy interesantes y talentosas por esos días, aunque al presente sólo DATAEP continua trabajando.

En 2012 Nexus nuevamente cambió de ubicación debido a que la casona donde laboraba supuestamente fue vendida. Entonces volvieron a la familiar 6 Norte, pero del número 3 interior 3 y finalmente interior 7, donde permanece hasta hoy.

El edificio que antiguamente fuera una fábrica de la conocida crema corporal Ibañez, cuenta con distintos interiores los cuales se acceden a ellos por una angosta escalera, en sus paredes se aprecian grandes pinturas con motivos prehispánicos. Ahora Nexus es un salón espacioso, posee sillones y mesas para sus clientes, también cuenta con cocina, barra de bebidas y finalmente el espacio dedicado a los talleres o tocadas. Está adornado por cuadros, libros, plantas, artículos curiosos y lo resguardan dos lindos gatos: Mishu y Momo.


Hasta antes de 2012, los altercados con las autoridades habían sido mínimos y sin consecuencias. Sin embargo, los nuevos vecinos resultaron sumamente intolerantes, Guaus comenta: “Nos empezaron a aventar a la policía y al ayuntamiento, empezaron a decir que vendíamos “mota” y cosas así. Entonces el dueño del edificio nos dijo que nos subiéramos al siguiente piso para que no hubiera problema con que saliera el ruido al exterior”.

Resultó evidente que adicionar actividades como talleres de danza africana y artes circenses le ganó cierto impulso al foro (junto con la animadversión vecinal). Por otra parte, los toquines también funcionaron bastante bien debido a que Nexus siempre está abierto para cualquier propuesta sin importar su género. En palabras del mismo Daniel: “Yo soy muy neutral, si vienen bandas de otros estados también se les da el espacio… Ha llegado gente de Brasil, Argentina, Colombia, Chile, Estados Unidos y España”.

No obstante, dos eventos singulares evoca con afecto su propietario. El primero ocurrió en 2014, cuando Nexus obtuvo la beca para proyectos culturales que promovió el Instituto Municipal de Arte y Cultura de Puebla. Con dicho apoyo logró contactar a los hnos. Mauricio y Francisco Sotelo del grupo Cabezas de Cera para que brindaran un recital con su música experimental y progresiva. Así fue como un 3 de octubre del año antes mencionado, el dúo se presentó en Puebla con buen éxito. Además, Guaus constató la gran sencillez de los hermanos. Sotelo y su inseparable ingeniero Edgar Arellín.

El segundo evento memorable fue la presentación del dueto arraigado en Morelos. Se trató ni más ni menos que de La Perra, una interesante propuesta denominada rock de cámara, en el que fusionan géneros como jazz y progresivo. La dupla está conformada por Elena Sánchez (bajo) y César Calderón (batería), también conocido como “Perico”. Ellos se presentaron el treintaiuno de agosto del 2019, aunque aquella vez no se contó con ningún apoyo municipal sino todo corrió a cargo del Centro Cultural.

Tales presentaciones podrían parecer triviales si se comparan con las realizadas habitualmente en la capital mexicana.  No obstante, es preciso señalar que Puebla no se distingue por albergar un gusto mayoritario para el rock progresivo y sus derivaciones, asunto contrario ocurre cuando se habla del ska, reggae y surf. Por tal motivo, emprender dichos eventos responde a la finalidad de promover distintos géneros a los habituales con bandas prominentes y refrescar una escena poblana conformista.

Nexus no es el único espacio cultural de la capital angelopolitana. Existen otros lugares análogos con los que convive, por ejemplo, Karuzo, El Venado y el Zanate, Musa, 19-40 café o Santos Remedios. Guaus no está totalmente enterado de los integrantes que conforman su gremio, pero valora las aportaciones de cada uno: “No considero que los espacios generen una competencia entre nosotros, sino que nos hemos vuelto opciones para distintos tipos de personas. Cada uno tiene su clientela, cada uno tiene sus gustos, cada quien tiene su propuesta”. Y agrega: “Como que nos repartimos la chamba, porque la gente se aburre de repente de llegar a un mismo lugar a ver los mismo toquines o las mismas bandas”.


De vuelta al cruel presente, la pandemia ocasionada por el COVID-19 trastornó profundamente todos los ámbitos humanos. Las consecuencias inmediatas para Nexus y sus congéneres fueron el cierre y posterior reapertura al mínimo de sus capacidades. Varios han tenido que abandonar sus proyectos. A pesar del oscuro panorama, Daniel encuentra aspectos positivos: “La gente tuvo mucho miedo, bajaron las ventas totalmente, carencia de ingresos, los empleados se fueron. Pero dentro de lo malo también hubo cosas buenas, porque te das cuenta de que no es únicamente depender del artista o de los artistas, sino que el espacio depende de la persona que está a cargo… Se establecieron otras dinámicas, la venta de postres, de comida, llevar a domicilio, que la gente pasara por sus cosas”.

En ese sentido, Guaus considera que debido a la pandemia las personas han comenzado a valorar sus espacios culturales. Nexus y similares, no son simplemente lugares para ir a “chupar y ligar”, sino que generan cultura, tolerancia y respeto. Además, estos deben producir sus propios mecanismos para subsistir a días aciagos como lo son ahora, en que los artistas están impedidos de manifestarse directamente y puedan atraer clientes. Tampoco piensa que los espacios culturales sostengan una alianza de colaboración o apoyo ante la imbatible crisis; actualmente todos ven por sí mismos. Empero, nadie busca perjudicar a los otros. Sus palabras serenas y firmes asoman cierta perspectiva empresarial madura y responsable, evidentemente fruto de la experiencia que brindan los años.

Pues bien, Nexus cumple 12 años en plena pandemia y no claudica. Su excéntrico propietario además de ser optimista, defiende el libre albedrío del espacio cultural que mantiene con pasión y tenacidad. Está complacido con la senda recorrida hasta ahora y estima que Nexus no necesita doctrinas, pero si tuviera una probablemente esa sería guiada por la libertad de pensamiento, el respeto y apoyo mutuo. Indudablemente su principal motivación es la gente que lo visita y retroalimenta.

Por último, Guaus manda un mensaje a sus clientes, ex trabajadores, colaboradores, amigos y demás gente involucrada en tan especial proyecto: “Gracias a todos por mantener el espacio, gracias por aceptar esta propuesta que es Nexus, gracias por encontrarle el gusto y seguir viniendo. Porque si no fuera por eso el lugar no existiría”.

Felicidades y larga vida Nexus.

P.D. No está de más decir que pueden apoyar a Nexus consumiendo sus productos, los cuales se ofrecen víaFacebook o visitando el foro bajo las normas higiénicas ampliamente difundidas en días y horarios permitidos. Guaus se complacerá de recibirlos.

‘No queremos aliados, queremos desertores del patriarcado’

Texto y fotos: Mónica Castro Lara |


Decidí titular este pequeño pero significativo texto con la muy puntual frase de la antropóloga e investigadora mexicana Marcela Lagarde, ya que desde hace semanas, no puedo sacarla de mi cabeza. He de confesar que siempre me ha ‘molestado’ esa palabra… ‘aliados’. Por eso, qué mejor momento para estar viv@s y transformarla en ‘desertores del patriarcado’, ¿no creen?

“Ahora que estamos juntas (ahora que estamos juntas), ahora que sí nos ven (ahora que sí nos ven). Abajo el patriarcado, se va a caer, se va a caer. Arriba el feminismo que va a vencer, que va a vencer”.

Después de mucho pensar, concluyo que no me avergüenza haber vivido mi primera marcha #8M hasta mis 31 años y aunque no ha sido por falta de empatía, desinterés o desinformación, creo que a todos nos llegan las cosas en EL momento adecuado y mí me llegó esta experiencia transformadora en el instante más apropiado de mi vida. Tenía apenas dos días de haber vivido la Marcha por la Paz, convocada por estudiantes de la BUAP y UPAEP principalmente, a la que se le unieron más de 35 universidades y créanme que fue un día muy interesante y aleccionador. Por ende, mis ganas y emoción por vivir la marcha del domingo, eran bastante grandes.

“Mujer consciente, se une al contingente”.

Un día previo a la marcha, nos juntamos varias personas en casa de mi hermana Elo y mi cuñado Hugo para hacer un primer ejercicio de conversatorio, un espacio seguro en donde mujeres y hombres (sí… hom-bres) pudimos dialogar, compartir ideas, debatirlas, comenzar a establecer protocolos, contar experiencias y sobre todo, aprender a escuchar. Fue una tarde francamente inolvidable y me quedo corta cuando digo que soy muy afortunada en poder vivirlo. Soy una fiel creyente de que parte de la reestructuración de las cosas y de cómo enfrentar la violencia sistemática que vivimos en nuestra cotidianidad, comienza con un cambio social-cognitivo, que debe existir (al menos) la disposición de escuchar, pero también de dialogar.


La deconstrucción de mujeres y hombres (porque pensar y afirmar que los hombres son los únicos que deben deconstruirse no resulta un ejercicio crítico) debe ir acompañada de esta necesidad de externar nuestras vivencias, nuestras inquietudes, nuestros errores y aciertos para dejar de enfrascarnos en lo individual y dar cabida a una colectividad más auténtica. Gracias, gracias, gracias a esas mujeres y hombres que el sábado pasado me enseñaron que ES posible. Y además, cerramos la tarde con broche de oro, diseñando nuestras consignas para el día siguiente, un inesperado momentazo feminista.


 “Ni una más, ni una más, ni una asesinada más”.


Desde que desperté el domingo 8 de marzo de 2020, tuve esa sensación de ansiedad cuando sabes que se avecina un evento extraordinario y afortunadamente, así lo fue. Elo me preguntó en el transcurso de la mañana si tenía miedo, a lo que contesté un rotundo y muy seguro “NO”, como pocas veces en mi vida. Me entristeció que mi mamá ya no pudiera acompañarnos a la marcha pero, había escrito su consigna en la mañana y nada en el mundo me impediría llevarla y alzarla como si lo estuviera haciendo ella misma. Alistamos todo y llegamos treinta minutos antes de la hora citada, en un punto muy cercano a la Fiscalía de Puebla. Nuestro pequeño contingente, estuvo conformado por amigas, amigas de amigas, familia de amigas y las alumnas de mi hermana. “¿Pañuelo verde o morado?” y cada quién escogía el que quería, un gesto desinteresado y unificador.

Se acercaba la hora y Doña Ansiedad (o sea, moi) comenzó a inquietarse porque veía cómo comenzaban a juntarse más y más mujeres en el punto de reunión y nosotros, seguíamos esperando a nuestras compañeras. El  liderazgo de mi hermana, tras unos consejos bastante apropiados, nos condujo por fin hacia la multitud. Esperamos algunos minutos bajo la sombra de un sagrado árbol y después, comenzaron a organizarnos en filas de 10. En ningún momento, quería perder de vista a Elo porque yo quería y necesitaba marchar con ella; la misma caminata nos permitió ubicarnos a un lado, atrás o delante de cada una. Marchar sin ella no hubiera tenido sentido.

“Mujer, escucha. Esta es tu lucha”.

La multitud (que al principio me hizo dudar si éramos pocas o no), hizo que me costara trabajo escuchar las primeras consignas feministas que gritaban los contingentes que estaban delante de nosotras; afortunadamente no tardamos en repetirlas y hacerlas nuestras. “Sembraremos rebeldía hasta cosechar libertad” y “Sororidad es la respuesta a través de amor, lucha y coherencia”, palabras prestadas de la talentosísima Audry Funk. No importó que fuera ‘cargando’ doble, eran MIS consignas y quería/necesitaba/ansiaba exponerlas, no sólo a las mujeres que participaban en la marcha, sino a cualquiera con una cámara fotográfica o a las cientos de espectadoras que nos miraban, algunas con empatía, otras con asombro, otras con desprecio y muchas otras, con angustia.

“Señor, señora no sea indiferente. Se mata a las mujeres en la cara de la gente”.

Sentí mucho miedo en la primera parada de RUTA (Metrobús poblano). Algunas chicas comenzaron a hacer pintas y a golpear los vidrios de la parada con la intención de destruirlos. “Sin agresión, sin agresión” gritamos muchas. Y al principio lo grité sin pensar y siguiendo a ‘la masa’ y luego lo hice de manera MUY consiente. Estoy TOTALMENTE a favor de las pintas, de que se queme todo, de que se escriban consignas y se haga visible todo el dolor, la rabia, la impotencia, la injusticia, la segregación, la desigualdad y la violencia. Pero tan simple como que no quería que las chicas que estaban caminando junto a la parada, sufrieran algún tipo de violencia o secuela. Justo ahí estaba mi mejor amiga desde los 12 años, justo ahí estaban las alumnas menores de edad de mi hermana, y justo ahí estaba mi compañera de vida y mi alma gemela, Elo, a quien pude sostener de la mano con todas mis fuerzas. Sentí miedo… y es muy válido; hice a un lado mi egoísmo y pensé únicamente en ellas y en su seguridad. ¿Incoherencia? Llámenle como quieran, pero fue un sentimiento auténtico. No voy a juzgar, ni a avergonzar, ni a hacer sentir mal a otras que lo hayan sentido y externado, así como he leído en publicaciones en redes sociales proveniente de mujeres cercanas a mí. Qué bien y qué orgullo que no hayan sentido miedo y que hayan sido coherentes. Necesitamos que nos contagien de ese valor y de esa seguridad, siempre.


 “Vivas se las llevaron, vivas las queremos”.

Benditos árboles del Boulevard 5 de Mayo que aligeraron en algunos puntos nuestra marcha. Me imaginé la posibilidad de tener una ciudad repleta de vegetación y me encabrona mucho saber y ser testigo que Puebla, ha perdido tantas y tantas zonas verdes. Ya muy avanzada la marcha, nos íbamos poco a poco quedando sin voz, aunque surgía alguna consigna y de inmediato, recuperábamos el ímpetu. Mientras todo eso pasaba, no pude dejar de pensar –y sentir- el enorme abanico de emociones que me invadían: por un lado, el enojo, rabia, hartazgo, miedo, sed de justicia, el ser la voz de las que ya no están o de las que conscientemente, no quieren estar; por otro, la felicidad de sabernos juntas, cobijadas y hermanadas, de irnos apropiando (aunque fuera por un instante) del espacio público SIN el miedo de todos los días, de caminar de la mano de mis amigas de toda la vida, del despertar de una sororidad genuina y finalmente, de formar parte de este momento de la historia.

“Y la culpa no era mía, ni dónde andaba, ni cómo vestía”.

Y es justo aquí donde lloré, poco, pero lloré. Traté de contener mis lágrimas y gritar la consigna lo más fuerte que pudiera. Porque si bien he sufrido de la violencia estructural, soy de las pocas privilegiadas que no han sufrido acoso y violencia sexual sistemática, mientras que la gran, GRAN mayoría de mujeres sí. Pensar en eso me destroza todos los días. Pienso también en todas esas ocasiones cuando mis amigas no se han abierto conmigo y no me cuentan esas experiencias terribles que han vivido en el pasado, pero estoy en el momento idóneo para madurar, agradecer y celebrar que tengan la confianza de hacerlo con otras mujeres, porque simplemente no se trata de mí. Es esa mentalidad colectiva la que ha cambiado mucho mi visión de las cosas.  

Entramos al zócalo de la ciudad y desafortunadamente, el poco espacio hizo que toda la caravana se dispersara. No importa. Aplaudo, agradezco y admiro enormemente a esas mujeres, colectivos y asociaciones que organizaron la marcha y que han luchado sin cansancio ni titubeos desde hace años: gracias por ser ejemplo de resistencia, por leer el pliego petitorio, por invitarnos y recibirnos con los brazos abiertos, porque no juzgan, porque nos quieren vivas y porque construyen día a día, un México más justo.

“Aleeerta. (Aleeerta). Aleeerta. (Aleeerta). Alerta, alerta, alerta. (Alerta, alerta, alerta). Alerta que camina, la lucha feminista de América Latina. Y tiemblen, y tiemblen, y tiemblen los machistas, que América Latina será toda Feminista'.

Mi experiencia, en MI primera marcha #8M, fue tremendamente satisfactoria; terminé con el corazón atiborrado y con mucho interés en continuar formándome. No presencié insultos, ni reclamos, ni violencia. Presencié únicamente a mujeres poblanas vinculadas por una lucha que no tiene descanso y de la que sin duda, quiero y formo parte. “The Future Is Female”, dicen por ahí. ¡NO! El presente lo es. Gracias infinitas a mi Elito por caminar a mi lado. Gracias a mi mamá por hacerlo simbólicamente. Gracias a las amigas, alumnas y conocidas que estuvieron a mi alrededor. Gracias a las amigas que no vi pero sé que estuvieron ahí. Que sea la primera de muchas.  

“Hay que abortar, hay que abortar, hay que abortar este sistema patriarcal”.

El sábado hablábamos en torno a la perspectiva de género. En este diálogo de saberes cada quien dijo lo que entendía. Ignorantes todos, Hugo compartió que desde su disciplina, las Relaciones Internacionales, había constructos que ayudaban a entender cómo se conciben los liderazgos mundiales, así como el poder que tiene cara (o atributos) masculina e interpela a las grandes líderes mundiales, como lo han sido Merkel o Thatcher y que, de alguna u otra manera, emulan un prototipo de “mujer-macho”. Pensando que, como asumía Frantz Fanon en torno a la raza negra, sería una desgracia que el destino de la mujer sea convertirse en hombre; Hugo lanzó una de sus preguntas mordaces: “[…] y, ustedes, ¿se han sentido alguna vez empoderadas fuera de los estándares o indicadores de poder patriarcal?” El silencio fue la respuesta más estridente. Después de lo incómodo alguna se atrevió a emitir un desgarrador NO. Es algo que me abruma y me ha tenido reflexionando desde el sábado. Ojalá algún día, pueda gritarles una respuesta diferente.

Iván García y Los Yonkis presentan disco en el Complejo Cultural Universitario BUAP



La placa discográfica “Sal Paraíso”, publicada en julio pasado por el cantautor Iván García, será presentada oficialmente el próximo 21 de marzo con un concierto memorable en el Teatro del Complejo Cultural Universitario BUAP de la capital poblana.


La Feria Nacional del Libro será el marco ideal para el lanzamiento de la edición especial del material discográfico, que entre otras sorpresas, cuenta en esta ocasión con la participación especial del músico hidrocálido Armando Palomas.

Sal Paraíso se compone de nueve canciones: “Ajedrez”, “Paraíso”, “En algún lugar del cielo”, “Equipaje”, “Estertor”, “Graznido”, “Interrogantes de un amor tardío”, “Lo que me tiene en las sombras”, “Los que se van”

Ritmos como el folk, bluegrass, country, e incluso algo de son, están presentes en el disco; alejándose por primera vez del sonido electro-dark que impregna las producciones anteriores de la agrupación.


Iván García y Los Yonkis preparan un set, en donde además de presentar los temas de "Sal Paraíso", se revisará la obra con la que la banda ha trabajado desde 2009. El show del próximo 21 de marzo en el CCU-BUAP contará con la presencia de muchos músicos invitados que acompañarán a Los Yonkis a dar el banderazo de esta nueva etapa musical, que dicho sea de paso, también servirá para presentar a Giovani Castillo como nuevo baterista de la banda poblana.


IVÁN GARCÍA Y LOS YONKIS PRESENTANDO "SAL PARAÍSO"
MARTES 21 DE MARZO - 20:00 HRS.
TEATRO DEL COMPLEJO CULTURAL UNIVERSITARIO BUAP
E N T R A D A    L I B R E


Claudio Narea, guitarrista de Los Prisioneros, dará concierto en Puebla



Claudio Narea, guitarrista de la mítica banda Los Prisioneros está de visita en nuestro país y el próximo 12 de noviembre se presentará en la Ciudad de Puebla para dar un concierto sin precedentes.


El músico y compositor chileno formó en 1983 -junto a Jorge González y Miguel Tapia- una de las agrupaciones -de culto- más importantes de Latinoamérica cuyas letras y música, siempre relacionadas con el acontecer social y político del continente, fueron la voz de una generación reprimida por la dictadura militar. Fueron La voz de los '80.

Recientemente "El baile de los que sobran" de Los Prisioneros fue catalogada por el portal español "20 Minutos" como la mejor canción chilena de la historia por encima de las obras de Violeta Parra, Víctor Jara, Los Jaivas, Manuel García, Los Tres, Los Ángeles Negros y Los Bunkers. Aquí la lista completa.

A la fecha Claudio Narea ha publicado tres discos como solista: "Claudio Narea", "El Largo Camino al Éxito" y "La Vida es Circular", siendo este último el material que se encuentra actualmente en promoción y que ha sido muy bien recibido por el público de su natal Chile y de varios países de América Latina.


La cita para el concierto de la Ciudad de Puebla es el próximo sábado 12 de noviembre en punto de las 21:00 horas en Karuzo Bar. Claudio Narea tendrá como invitados especiales a Iván García y Los Yonkis, banda poblana con vasta trayectoria nacional.


Los accesos al concierto tendrán un costo de $100.00 devaluados pesos y pueden adquirirse en Puebla directamente en Karuzo Bar o en las oficinas de Container City (en horario de 10 a 14 horas y de 17 a 19 horas).


También puedes comprar tus boletos en línea a través del siguiente link:

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Escalera y “Cinco grados bajo cero” en Microteatro Puebla


Por Jaime López Blanco |
 

Su primera vez. Y como sucede generalmente cuando se trata de las primeras ocasiones, nervios y emociones encontradas en su ser. Risas inquietas que emanan de su semblante. Enrique Escalera, hombre de teatro independiente en Puebla y “virgen” en el ámbito del Microteatro, hizo su debut en el mismo con la obra “5 grados bajo cero”, que forma parte de la temporada denominada “Por mis muertos”. Cabe recordar que Microteatro es una interesante apuesta que presenta en escena textos cortos (los cuales no rebasan los 15 minutos de duración) y que se desarrollan en un espacio pequeño (15 metros cuadrados) ante un público máximo de 15 espectadores. Asimismo, hay que señalar que Escalera ha dedicado 20 años de su vida a las artes escénicas y se caracteriza por colaborar  con  causas filantrópicas, mediante su talento y lo que más ama hacer en la vida (“Primer Encuentro de Teatro con Causa” es un claro ejemplo de ello).  

Al abundar en la inmaculada relación que sostenía con el Microteatro, Enrique Escalera confesó que nunca antes había asistido a una obra de esa clase, hasta que le hicieron la invitación para dirigir una de ellas. Entonces, se dio un tiempo y acudió de “scouting”  para ver cómo funcionaba y realmente le encantó la propuesta. 


“Es una especie de laboratorio muy interesante, te ponen a resolver cosas así de ya, para ayer”

“5 grados bajo cero” también representa la oportunidad para que Escalera vuelva a trabajar con adultos.  Dicho amante del teatro igualmente comentó que la dirección fue fácil y muy lúdica porque “los actores estaban bastante dispuestos, cooperativos y propositivos”. La obra en comento trata sobre un grupo de personas encerradas, de manera forzada, en el frigorífico de verduras de un mercado y que buscan la manera de escapar de ese  aislamiento.  Maneja un tono de comedia ligera y se distingue por ser interactiva. Actúan Leonardo Fierro, Roxana Gonmes, Karla Muñoz de Cote y Nacho Armenta, quienes van alternando funciones.  

Enrique Escalera espera que la audiencia salga encantada, más después de interactuar con el texto escenificado, cuya autora es Almudena Vázquez. Admitió que sigue sintiendo nervios en todas las funciones, porque nunca se sabe qué va a pasar, ya que todo se presenta totalmente en vivo. Además, ratificó que para él lo más importante es que se diviertan tanto el público como todos los demás involucrados en la puesta en escena.

“5 grados bajo cero” se presenta de jueves a domingo, con seis funciones cada uno de esos días, en la Sala 2 de Microteatro Puebla,  el cual está ubicado en la calle 8 norte número 606. 

Quiero Club y Gepe toman la Ruta Indio


Por Selene Tlapanco | 

 
La Ruta Indio es una iniciativa que pretende acercar el talento musical a nuevos públicos ávidos por una oferta más amplia y actual. Esta iniciativa se realiza a través de una gira de conciertos que tendrá presencia en varios estados de la república mexicana, en donde Puebla será el punto de partida.

Por primera vez, Ruta Indio presenta a Gepe y Quiero Club, lo mejor del nuevo pop indie de Chile y México la noche del 27 de agosto en Sala Fórum, en San Andrés Cholula, Puebla.



Quiero Club (originarios de Monterrey) se caracterizan por combinar elementos de diferentes géneros; como el rock, la música electrónica y el pop. Sus presentaciones están llenas de energía, poder y creatividad.

En sus más de diez años de carrera, se han presentado en los festivales más importantes de México y Latinoamérica. En 2009 abrieron el concierto de Depeche Mode en la Ciudad de México y han compartido escenario con importantes agrupaciones internacionales de la talla de NIN, The Kills, Portishead, The Flaming Lips, MGMT, entre otras.

Sus temas, forman parte de las películas: Efectos Secundarios, Casi Divas, Rudo y Cursi, entre otras como Abolición de la Propiedad, cuyo tema "Hablar de más", fue nominado para los premios CANACINE 2014 como mejor canción en película mexicana.
 


Daniel Alejandro Riveros Sepúlveda, mejor conocido como Gepe, es un músico, compositor y multiinstrumentista chileno capaz de pasar por el rock, el pop acústico, el pop con bases electrónicas y hasta la nueva canción chilena para componer armonías y melodías a partir de ellos.

Comenzó su trayectoria en 1999 como cantante e instrumentista en Taller Dejao, junto a Javier Cruz y colaboraba con Javiera Mena en coros y batería para su disco debut "Esquemas Juveniles”.

En 2005, sorprendió al público y a la prensa con el lanzamiento de su primer disco en solitario Gepinto y desde ese año no ha dejado de hacerlo. Gracias a su talento se ha presentado en giras y festivales como Vive Latino en México, South by Southwest en EE.UU. y Primavera Sound o El Día de la Música en España, además de en diversos festivales a gran escala en Chile como Viña del Mar. Actualmente visita nuestro país para presentar su más reciente producción, Estilo Libre.




Datos del evento:


Día: Jueves 27 de agosto de 2015
Lugar: Sala Forum
Dirección: Av. Avila Camacho #1224, San Andrés Cholula, Puebla
Acceso: 9 PM



Más información:


Ruta Indio


Quiero Club
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Gepe
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